Los Nacionales de Washington han rechazado la opción mutua de 8 millones de dólares sobre el ex jardinero de los Yankees Joey Gallo, con lo que el otrora poderoso bateador vuelve al mercado de agentes libres. Esta es la tercera temporada libre consecutiva en la que Gallo, que cumplirá 31 años a finales de este mes, explorará sus opciones tras una decepcionante temporada 2024 con Washington, en la que bateó sólo .161 con 10 jonrones y 27 carreras impulsadas.
¿Qué ha pasado?
Joey Gallo, antaño un temido bateador de potencia, ha cambiado radicalmente su trayectoria desde sus mejores días con los Rangers de Texas. Dos veces All-Star y dos veces Guante de Oro, Gallo alcanzó su punto álgido con temporadas consecutivas de 40 jonrones en 2017 y 2018. Era una rareza en la MLB, un verdadero bateador de “tres resultados verdaderos” que lideró la Liga Americana en paseos en 2021 y produjo una gran potencia al tiempo que mantenía unas sólidas métricas defensivas. Pero su permanencia en los Yankees marcó el comienzo de una etapa más dura. Adquirido por Nueva York en la fecha límite de traspasos de 2021, se esperaba que aportara equilibrio a una alineación necesitada de potencia zurda. En lugar de ello, su paso por los Yankees puso de manifiesto su inconsistencia: bateó sólo 0,159 en 140 partidos con los Bombarderos del Bronx, y se ponchó 194 veces en ese periodo, lo que hizo que los aficionados y la organización se cuestionaran su idoneidad.
Con los Nacionales, Joey Gallo se enfrentó a otro año difícil. Las lesiones le limitaron a 76 partidos, incluido un esguince de la articulación AC del hombro y una distensión en los isquiotibiales que le dejó fuera casi dos meses. Incluso cuando estaba en la alineación, su producción disminuyó; su OPS de .613 fue el más bajo de su carrera en una temporada completa, y su WAR de 0,3 fue el más bajo desde su año de novato en 2016.
Sin embargo, la versatilidad defensiva de Joey Gallo siguió siendo positiva. Trasladado de su puesto tradicional de jardinero de esquina a la primera base, jugó 59 partidos en esa posición, donde siguió aportando valor con siete carreras defensivas salvadas. Esta flexibilidad podría atraer a equipos que necesitan un bate zurdo que pueda jugar en varias posiciones.
En los últimos años, la reputación de Joey Gallo como jugador con muchos strikeouts y una media de bateo baja ha eclipsado sus otros atributos, pero su potencial de potencia sigue siendo innegable. A pesar de su larga carrera luchando por alcanzar la media de bateo -con un promedio de .194-, la potencia bruta de Gallo y su historial de producción de carreras le mantienen en la conversación, especialmente para los equipos que buscan añadir profundidad y un activo defensivo a un precio razonable.
A partir del lunes a las 5 p.m. ET, Gallo volverá a estar disponible para negociar con cualquier equipo. Para el ex Yankee, este periodo de agencia libre podría ser un capítulo decisivo, ya que intentará demostrar que aún puede ofrecer el tipo de rendimiento que le convirtió en uno de los mejores bateadores de la MLB. Tanto si aterriza en un club que busque un proyecto de recuperación como si está dispuesto a apostar por su potencial, el próximo movimiento de Gallo será seguido muy de cerca.