Tras la decepcionante derrota del viernes en el partido inaugural de la serie, el entrenador de los Yankees, Aaron Boone, describió la situación como una coyuntura crítica para la temporada de los Yankees. Aunque dos partidos no bastan para calibrar definitivamente la respuesta del equipo, las señales iniciales han sido prometedoras.
La serie del fin de semana en Fenway Park, el lugar donde comenzaron sus luchas seis semanas antes, vio a los Yankees comportarse más como el equipo que había impresionado durante los dos primeros meses y medio de la temporada. El partido del domingo culminó con una victoria por 8-2 sobre los Medias Rojas, lo que supuso su segunda victoria en una serie de las once últimas.
Alex Verdugo, que contribuyó con varios hits en cada partido de la serie, destacó la importancia de este cambio. Reconoció las recientes dificultades del equipo y expresó su optimismo sobre el impacto potencial de las nuevas adquisiciones en la fecha límite de traspasos. Verdugo transmitió el entusiasmo y la confianza de los Yankees en su capacidad para lograr resultados notables.
“Es enorme”, dijo el jardinero de los Yankees. “Sabemos dónde hemos estado el último mes y medio. Todo empieza así. Seguimos confiando los unos en los otros, seguimos adelante y conseguimos un par de tíos en la fecha límite de traspasos, un par de adquisiciones que van a refrescar las cosas aquí dentro. Estamos entusiasmados. Estamos contentos con el equipo que tenemos y sabemos que podemos hacer cosas especiales”.
El ambiente en torno al equipo, que había sido sombrío desde su última visita a Fenway, parece estar cambiando positivamente. Jazz Chisholm Jr., recientemente adquirido a los Marlins, debutó con los Yankees. Aunque su actuación fue modesta, con 1 de 5 y una base robada, su presencia pareció vigorizar al equipo.
De cara al futuro, los Yankees (62-45) prevén el regreso de Giancarlo Stanton para el partido del lunes en Filadelfia, lo que podría re