En el siempre cambiante panorama de historias de redención del béisbol, la trayectoria de Kyle Hart es un testimonio de perseverancia y adaptación. El zurdo, que en su día vistió el uniforme de los Medias Rojas de Boston antes de convertirse en una sensación en la Organización Coreana de Béisbol (KBO), ha surgido como una perspectiva intrigante para los Yankees de Nueva York, que están dando forma a su arsenal de lanzadores para 2025. Su historia ejemplifica cómo el béisbol internacional puede revitalizar carreras y crear oportunidades inesperadas.
De destacar en la universidad a luchar en la MLB
Kyle Hart, natural de Cincinnati y nacido a finales de 1992, mostró por primera vez su destreza como lanzador en la Universidad de Indiana Bloomington. Su trayectoria universitaria no estuvo exenta de adversidades: una operación Tommy John amenazó con hacer descarrilar su campaña de tercer año. Sin embargo, la respuesta de Hart a este contratiempo presagió su resistencia futura. Al volver a la acción, inscribió su nombre en la historia de la escuela, acumulando 31 victorias para reclamar el segundo puesto en la lista de victorias de todos los tiempos del programa.
En el Draft de la MLB de 2016, los Medias Rojas de Boston se arriesgaron con Hart en la 19ª ronda, iniciando su odisea en el béisbol profesional. Tras ascender metódicamente por las ligas menores, alcanzó la cima con su debut en la MLB el 13 de agosto de 2020. Sin embargo, las brillantes luces de las Grandes Ligas resultaron ser un reto. Su etapa inicial arrojó cifras difíciles: un ERA de 15,55 en 11 entradas en cuatro apariciones. En noviembre de 2020, la decisión de los Medias Rojas de prescindir de él parecía poner en duda sus aspiraciones en las Grandes Ligas.