Clay Holmes reconoce los retos a los que se enfrentó durante la última parte de la temporada 2022. Comprende que su camino desde el relativo anonimato hasta el éxito no estuvo exento de obstáculos. Reconoce el mayor escrutinio que recibió tras una serie de actuaciones irregulares el pasado mes de abril, que llevaron a algunos aficionados a cuestionar el papel de Clay Holmes como cerrador.
Su conciencia se extendió a las reacciones del público, incluidos abucheos dispersos en el Yankee Stadium, comentarios críticos en los medios de comunicación y comentarios negativos en las redes sociales. Esto sugiere una buena disposición a aceptar los comentarios, tanto positivos como negativos, como parte de ser un atleta profesional en el punto de mira.
Clay Holmes transmitió a NJ Advance Media antes de la victoria por 9-2 del lunes sobre los Twins que esos son desafíos reales a los que se enfrentan los jugadores. Subrayó que estas situaciones pueden afectar mentalmente a los jugadores, generándoles pensamientos y emociones que deben superar.
Ha hablado abiertamente de la importancia de la fe en su vida, sobre todo cuando se enfrenta a retos en el campo. Al igual que su padre, Wendell Holmes, pastor de Place of Grace, una iglesia no confesional de Slocomb (Alabama), Clay Holmes encuentra consuelo y guía en sus creencias cristianas.
Clay Holmes ha atribuido a su fe un importante papel a la hora de ayudarle a superar dificultades, tanto personales como profesionales. Esto incluye recuperarse de los problemas de rendimiento durante su etapa como cerrador de los Yankees de Nueva York en los últimos dos años y medio.
Clay Holmes saca fuerzas de la espiritualidad
Clay Holmes ha hablado abiertamente sobre los retos de su carrera, haciendo hincapié en la importancia de la fe y la perspectiva durante los periodos difíciles. Cree que su identidad va más allá de las victorias y las derrotas, lo que le permite mantener la objetividad y aprender de sus luchas. Este enfoque, junto con la búsqueda de orientación, ayuda a Clay Holmes a identificar áreas de mejora y a avanzar de forma constructiva.
El cerrador de los Yankees reconoce la importancia de su sistema de apoyo, que incluye a su familia, amigos y entrenadores de lanzamiento. También menciona la guía de la leyenda del béisbol Mariano Rivera.
Según Clay Holmes, siempre que Mariano Rivera está presente en los actos del Yankee Stadium, le busca para conversar. Estas interacciones se han producido en diversos entornos, como la sede del club y la oficina del jefe de equipo. La naturaleza y el contenido de sus conversaciones siguen sin revelarse.
Clay Holmes también mencionó que Rivera siempre le ha servido de caja de resonancia. Sus debates se centraron en comprender los puntos fuertes de cada uno y tener confianza en ellos. El actual cerrador de los Yankees reconoció el estatus de Rivera como el mejor cerrador de todos los tiempos y destacó la importancia de aprender y estudiar de sus experiencias.
Rivera también le ofreció a Clay Holmes su número de teléfono. El cerrador mencionó que Rivera siempre estaba disponible para una llamada si era necesario. Reconoció que, si bien aún no le había tendido la mano, sabía que podía contar con el apoyo de Rivera si alguna vez tenía una pregunta apremiante.
Clay Holmes encuentra motivación en Rivera online
Más allá de su red de apoyo inmediato, Clay Holmes ha mencionado que se inspira en la leyenda del béisbol Mariano Rivera. Busca activamente los puntos de vista de Rivera, no a través de la comunicación directa, sino a través de recursos en línea fácilmente disponibles.
Clay Holmes ve con regularidad las entrevistas de Rivera, sobre todo en plataformas como YouTube, centradas en temas relacionados con el aspecto mental de los lanzamientos de relevo. Esto sugiere un enfoque proactivo para aprender de la experiencia y los conocimientos de Rivera.
Entre los ejemplos concretos que Clay Holmes considera inspiradores se incluye la forma en que Rivera afronta los contratiempos, como el famoso séptimo partido de las Series Mundiales de 2001. Durante ese partido, los Diamondbacks de Arizona orquestaron una remontada tardía, negando a los Yankees su cuarto campeonato consecutivo. Aprendiendo de los retos del pasado, Clay Holmes se esfuerza por mejorar su propia resistencia mental.
Expresó su agradecimiento por ver las entrevistas de Rivera, destacando su relevancia para sus propias experiencias. Clay Holmes encuentra valor en la mentalidad y el enfoque del juego de Rivera, especialmente en su inquebrantable confianza y fe. El cerrador cree que se pueden extraer valiosas lecciones de la perspectiva de Rivera, especialmente teniendo en cuenta los retos que inevitablemente surgen, sobre todo para un cerrador.
Clay Holmes destacó la inevitabilidad de encontrarse con situaciones difíciles en el béisbol, independientemente del éxito que uno haya tenido en el pasado. Hizo hincapié en la importancia de afrontar y superar rápidamente esos momentos, señalando que esta capacidad distingue a los jugadores de élite del juego.
Clay Holmes también reconoció la destreza de Rivera en el cierre de los partidos, señalando sus raros casos de paradas perdidas. Sin embargo, destacó la capacidad de Rivera para superar rápidamente esos contratiempos, evitando que afecten a su rendimiento durante periodos prolongados.
Clay Holmes quiere mantener el legado de cerradores de élite de los Yankees
Los Yankees de Nueva York tienen una larga tradición de emplear cerradores excepcionales, que se remonta a la década de 1970 con el ganador del Cy Young Sparky Lyle y el miembro del Salón de la Fama Goose Gossage. Esta tendencia continuó en la década de 1980 con Dave Righetti y John Wetteland, que desempeñaron un papel crucial en la victoria de los Yankees en las Series Mundiales de 1996.
El legado alcanzó verdaderamente nuevas cotas con el legendario Mariano Rivera, que dominó las últimas entradas durante casi dos décadas. Su característica bola cortada y su excepcional control le valieron un récord de 652 paradas y un notable 2,21 de ERA a lo largo de 19 temporadas.
El dominio de Rivera se extendió a la postemporada, donde obtuvo un impresionante récord de 8-1 con una sorprendente ERA de 0,70 en 96 partidos. Sus 42 paradas en la postemporada siguen siendo inigualables a día de hoy.
Tras la retirada de Rivera en 2013, los Yankees continuaron encontrando el éxito con cerradores de élite. Andrew Miller tuvo una gran actuación en 2016, seguido de Aroldis Chapman, que fue seleccionado para el All-Star en 2018, 2019 y 2021. En 2023, Clay Holmes se convirtió en la última incorporación a este prestigioso linaje de cerradores de los Yankees.
La adquisición de Clay Holmes por los Yankees de Nueva York en julio de 2021 no fue recibida con bombo y platillo. A pesar de poseer un potente sinker, sus 91 partidos anteriores con los Piratas de Pittsburgh (2018-2021) se vieron empañados por problemas de control, lo que resultó en un alto ERA de 5,57.
El intercambio en sí se consideró de bajo riesgo para los Yankees, ya que intercambiaron a dos jugadores de ligas menores, Diego Castillo y Hoy Park, ninguno de los cuales estaba proyectado para tener un impacto significativo en las Grandes Ligas de Béisbol, según los informes de los cazatalentos. Sin embargo, la llegada de Clay Holmes a Nueva York coincidió con un cambio notable. Los Yankees introdujeron ajustes en su mecánica de lanzamiento, animándole a confiar en su sinker dominante y a dar prioridad a la consistencia sobre la precisión milimétrica. Este cambio dio lugar a un aluvión constante de bolas rápidas de dos costuras de 96-97 mph, que resultaron excepcionalmente difíciles de conectar para los bateadores rivales. Con su imponente corpulencia (1,90 m, 85 kg), Holmes se consolidó rápidamente como una fuerza a tener en cuenta en el bullpen, superando las expectativas iniciales.
El catcher de los Yankees Ben Rortvedt elogió el sinker de Clay Holmes, afirmando que su acción, velocidad y precisión lo sitúan entre los mejores lanzadores de la liga.
La trayectoria de Clay Holmes con los New York Yankees ha sido una de éxito inesperado y perseverancia. Después de luchar con problemas de control y un alto ERA (5.57) en 91 juegos con los Piratas de Pittsburgh (2018-2021), fue adquirido por los Yankees en un intercambio por dos jugadores de ligas menores. El equipo introdujo ajustes en su mecánica y su forma de lanzar, lo que se tradujo en una mejora significativa. Terminó la temporada 2021 con un sólido ERA de 1,61 en 25 apariciones, en comparación con su ERA de 4,93 en 44 partidos con los Pirates.
En 2022, Clay Holmes se hizo con el puesto de cerrador y fue seleccionado para el All-Star por su dominante primera mitad. A pesar de enfrentarse a problemas como una mala racha a finales de temporada y una lesión menor en el hombro, terminó la temporada con unos números respetables: un ERA de 2,54 en 62 partidos, convirtiendo 20 de sus 25 oportunidades de salvar el partido. Esto acalló las dudas iniciales sobre la sostenibilidad de su éxito.
La temporada 2023 comenzó con una mala racha para Clay Holmes, suscitando preocupación entre los aficionados ya que su ERA alcanzó 5,40 tras siete partidos. Sin embargo, esto resultó ser un bache temporal, no un declive a largo plazo.
Cabe destacar que durante este periodo recibió el apoyo público de la leyenda del béisbol Mariano Rivera, que había estado observando su rendimiento. Rivera mencionó a The Athletic en mayo del año pasado que había vivido situaciones similares en las que los partidos perdidos causaban preocupación entre los aficionados. A pesar de las reacciones iniciales, Rivera destacó que su rendimiento se mantuvo constante a lo largo de la temporada, con los mismos números a final de año. Expresó su confianza en la capacidad de Clay Holmes para superar los retos y seguir destacando, señalando que Holmes poseía las aptitudes y el potencial necesarios para tener éxito y progresar en su carrera.
LÍDERES DE PARADAS EN LA CARRERA DE LOS YANKEES | ||
Jugador | Año | Ahorra |
Mariano Rivera | 1995-2013 | 652 |
Dave Righetti | 1979-90 | 224 |
Aroldis Chapman | 2016, 2017-22 | 153 |
Ganso Gossage | 1978-83, 1989 | 151 |
Sparky Lyle | 1972-78 | 141 |
Johnny Murphy | 1932-43, 1946 | 104 |
Steve Farr | 1991-93 | 78 |
Joe Page | 1944-50 | 76 |
John Wetteland | 1995-96 | 74 |
Lindy McDaniel | 1968-73 | 58 |
David Robertson | 2008-14, 2017-18 | 53 |
Andrew Miller | 2015-16 | 45 |
Clay Holmes | 2021-23 | 44 |
Rafael Soriano | 2011-12 | 44 |
Luis Arroyo | 1960-63 | 43 |
Tras las dificultades iniciales en 2023, Clay Holmes encontró su equilibrio, ofreciendo en su mayoría salidas sin anotaciones durante los cinco meses restantes de la temporada. Al final registró un ERA de 2,66 en 66 apariciones, convirtiendo 24 de 27 oportunidades de salvamento. Esta buena actuación consolidó su papel como cerrador de los Yankees.
Como 2024 marca su último año antes de la agencia libre, Holmes está listo para un aumento significativo en el salario, aunque sigue sin estar claro si será con los Yankees u otro equipo. Su excepcional lanzamiento, su éxito probado en un mercado importante y su edad (31 años) le convierten en un objetivo potencial para numerosos equipos en el mercado libre.
Las intenciones de los Yankees con respecto al futuro de Clay Holmes siguen sin revelarse. Podrían volver a contratarle o explorar otras opciones, incluyendo potencialmente el desarrollo de un relevista más joven y rentable como Ian Hamilton como posible sucesor del cerrador.
Mientras expresa su esperanza en un futuro más allá de 2024 con los Yankees, Clay Holmes se mantiene centrado en la temporada actual, guiándose por su fe y las conversaciones con Mariano Rivera. Tiene un objetivo claro para la próxima temporada: contribuir al regreso de los Yankees de Nueva York a los playoffs y aspirar a una profunda carrera de postemporada.
Clay Holmes prioriza ganar las Series Mundiales con los Yankees en su último año de contrato. Subrayó que su motivación procede principalmente de la aspiración de alcanzar este objetivo y dar lo mejor de sí mismo para lograrlo.
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