El nuevo entrenador de bateo de los Yankees , James Rowson, no está a favor de realizar ningún cambio filosófico importante para resucitar el decaído ataque. Aboga por centrarse en el proceso como la mejor manera de hacerlo. Un día después de ser confirmado como nuevo entrenador de bateo, James Rowson habló sobre su probable enfoque para el equipo.
Con más de 20 años de experiencia como entrenador en el béisbol profesional, James Rowson ha perfeccionado su enfoque único para optimizar el rendimiento de los bateadores. En lugar de implantar una filosofía de bateo única y global que obligaría a los jugadores de los Yankees a adaptarse, su estrategia gira en torno a la identificación de lo que impulsa a cada bateador individualmente.
“Intento mantenerme alejado del pensamiento de una filosofía”, dijo el nuevo entrenador de bateo. “Creo que cuando te pones en ese camino, lo que acabas haciendo es intentar que todo el mundo se alinee con una forma concreta de hacer las cosas. No creo que llegues a las masas de esa manera. Cuando hablo de una filosofía de golpeo, gran parte de ella consiste en conocer más a los chicos y lo que hacen, y eso acaba siendo su camino hacia el éxito.”
El proyecto de James Rowson prefiere los retoques al tedio
El nuevo entrenador de bateo de los Yankees pretende adaptar su entrenamiento a las necesidades y estilos específicos de cada jugador, haciendo hincapié en un enfoque adaptativo y personalizado. James Rowson, como transmitió en una reciente entrevista de Zoom con los periodistas, se caracterizó por no adherirse estrictamente ni a los métodos de entrenamiento de la nueva escuela ni a los de la vieja escuela. En su lugar, se posicionó como una persona en continua evolución y aprendizaje en su viaje como entrenador.
James Rowson evitó enmarcar su enfoque en la filosofía, destacando la importancia de comprender a cada jugador individualmente. Hizo hincapié en la necesidad de adaptar las estrategias en función de las características individuales, pues considera que este planteamiento conduce a un éxito más generalizado entre los jugadores.
“Como entrenador de bateo, no tengo un solo estilo. Creo que el jugador crea tu estilo y tú tienes que aprender su estilo”, dijo Rowson. “Si un tipo piensa de una manera y produce un resultado, eso es bueno. Hay que atenerse a ese pensamiento. Si hay otro jugador que piensa exactamente lo contrario y produce un resultado positivo, te ciñes a ese pensamiento. Creo que la clave es no encasillar a un jugador en tu filosofía. Aprendes lo que piensan, lo que producen y así es como te mueves”.
Su enfoque se centra en establecer conexiones con cada bateador de la alineación de los Yankees, comprendiendo atentamente qué métodos se adaptan mejor a ellos. James Rowson tiene la convicción de que, de este modo, puede contribuir a que el equipo consiga un campeonato, el objetivo último que aspira a alcanzar.
James Rowson transmitió su enfoque del entrenamiento, haciendo hincapié en la ausencia de un estilo fijo. Según él, la individualidad del jugador determina el estilo de entrenamiento, y subrayó la importancia de comprender y adaptarse al enfoque único de cada jugador. Abogaba por la flexibilidad, centrándose en los pensamientos y los resultados del jugador en lugar de imponer una filosofía rígida.
Del mismo modo, la filosofía se extiende a la división de bateo de las ligas menores de los Yankees, donde los afiliados florecieron en 2023 a pesar de los desafíos del equipo de Grandes Ligas. La intención de James Rowson no es alterar bruscamente las instrucciones de desarrollo dadas a los prospectos. En lugar de ello, pretende analizar ese enfoque, integrar sus puntos fuertes en el Bronx y explorar vías para mejorar el rendimiento de todas las partes interesadas.
James Rowson mencionó que tenía experiencia en desarrollo, fue coordinador de bateo y trabajó como entrenador de bateo en ligas menores. Expresó su comprensión de las ligas menores y de los elementos necesarios para la progresión. El nuevo entrenador de bateo de los Yankees hizo hincapié en la importancia de mantener procesos eficaces cuando el sistema funciona bien. Según él, sea cual sea el nivel -ligas menores o mayores- es crucial evaluar continuamente el proceso y esforzarse por mejorar.
Pero dista mucho de ser una tarea sencilla
El regreso de James Rowson a los Yankees, casi diez años después de su prolongada estancia en el sistema de ligas menores del equipo, coincide con la temporada más difícil de la franquicia en décadas. Al tomar el relevo de Sean Casey, Rowson se enfrenta a la responsabilidad de rejuvenecer el rendimiento de Giancarlo Stanton, guiar a jugadores veteranos como Anthony Rizzo hacia temporadas resurgentes y fomentar el rápido progreso de jóvenes talentos como Anthony Volpe.
James Rowson, en su tercera etapa como entrenador de bateo en las grandes ligas tras ser contratado el lunes, sigue adaptándose al nuevo papel. Ya se ha iniciado la comunicación con los jugadores de los Yankees para elaborar un plan que les ayude a afrontar la próxima temporada.
En el caso de Stanton, que tuvo una temporada 2023 complicada, Rowson ha iniciado el proceso enviando un mensaje de texto al bateador designado. La siguiente fase consiste en profundizar en el análisis de los vídeos y mantener conversaciones detalladas con Stanton para conocer a fondo la forma de jugar del bateador.
James Rowson se mostró entusiasmado con Giancarlo Stanton y expresó su esperanza de que Stanton se anticipe a la colaboración. Mencionó que mantendrían una conversación para discutir los pensamientos, sentimientos, preferencias, enfoques exitosos y retos de Stanton. El objetivo inicial será conocer a Stanton como persona, con la convicción de que si se le entiende a nivel personal se abordarán de forma natural los aspectos relacionados con el béisbol.
Tras el último partido en Kansas City, Stanton expresó su intención de evaluar a fondo su rendimiento durante el invierno y aplicar los cambios necesarios. La temporada 2023 no fue sólo un bajón para el jugador de 34 años; fue notablemente pésima, marcada por estadísticas bajas en su carrera, como un OPS de .695 y un promedio de bateo de .191.
Dada la experiencia y el estilo distintivo de Stanton, se espera que cualquier ajuste se produzca de forma más discreta durante la temporada baja. Si bien James Rowson puede ofrecer apoyo durante todo el año, puede ser un recurso valioso para garantizar que el veterano que se lesiona con frecuencia se ciña a su rutina y mecánica preferidas.
Trabajando con los bateadores novatos de los Yankees
James Rowson puede aprovechar su experiencia adquirida como entrenador en las ligas menores para guiar a jóvenes jugadores de los Yankees como Volpe, el receptor Austin Wells, el jardinero Jasson Domínguez (una vez que regrese de la operación Tommy John) y otros.
El nuevo entrenador de bateo de los Yankees hizo hincapié en la importancia de aprovechar los puntos fuertes de cada uno, aconsejando a los jugadores que empiecen por lo que les ha dado éxito y se basen en ello. Destacó que el papel del entrenador de bateo es colaborar con el jugador, facilitar las conversaciones y realizar los ajustes en colaboración. Según James Rowson, este enfoque a nivel profesional es más una asociación que una dictadura.
Esta mentalidad será ventajosa para un talento como Volpe, que tuvo dificultades para mantener la regularidad ofensiva durante su temporada de debut. Asegurar a Volpe que es aceptable basarse en las estrategias que le dieron éxito en las ligas menores, en lugar de insistir en alterar su enfoque contra una competencia más formidable, le posiciona para una segunda temporada más exitosa. Si bien se pueden hacer ajustes -considerando el promedio de bateo de .209, el OPS de .666 y los 167 ponches de Volpe en su año de novato-, el enfoque sigue siendo incorporar elementos de la prometedora versión prospecto de Volpe.
¿Y el cuerpo técnico?
James Rowson aún no ha determinado si los entrenadores asistentes de bateo de los Yankees de Nueva York Casey Dykes y Brad Wilkerson permanecerán en el personal bajo su dirección la próxima temporada.
El nuevo entrenador de bateo de los Yankees mencionó que aún no había llegado a ese punto. Es algo que discutirá con [manager Aaron Boone] y con el grupo, para entender hacia dónde podrían dirigirse a continuación. En estos momentos, su objetivo es aclimatarse. Sin embargo, no cabe duda de que mantendrán esas conversaciones, probablemente en un futuro próximo.
Casey Dykes y Brad Wilkerson permanecieron en el cuerpo técnico de los Yankees después de que el entrenador de bateo Dillon Lawson fuera despedido a mediados de la temporada pasada. Dykes ascendió en el programa de bateo de las ligas menores de Nueva York antes de unirse a la plantilla de las grandes ligas en 2022. Wilkerson, que fue elegido en primera ronda del draft y lleva ocho años en la MLB, fue contratado por los Yankees como entrenador asistente de bateo la temporada pasada.
El factor del niño local
James Rowson es natural de Mount Vernon (Nueva York) y estudió en el instituto Mount St. Michael del Bronx. Vestir las rayas y entrenar en las Grandes Ligas al equipo de su ciudad natal es la realización de su sueño.
James Rowson comentó que, cuando crecía en Nueva York, si alguien le hubiera dicho hace años, cuando jugaba en las ligas menores de Mount Vernon, que algún día llegaría a ser entrenador de bateo de los Yankees, se habría apuntado con ilusión todos los días de la semana. Dijo con una sonrisa que estar en este punto y tener la oportunidad de asumir este papel para el equipo de su ciudad natal significaba todo para él. James Rowson añadió que, aunque era muy emocionante, lo era aún más saber que ganar en Nueva York sería increíble. Afirmó que ese era el objetivo final.
¿Qué le parece? Deje su comentario a continuación.