Durante la primera entrada del partido entre los New York Yankees y los Oakland Athletics, el árbitro Hunter Wendelstedt decidió lucirse y mostrarse totalmente parcial a favor del bando de Oakland. Acusó al entrenador de los Yankees, Aaron Boone, de decir algo desde el banquillo y le expulsó, obligando al entrenador de banquillo, Brad Ausmus, a asumir las funciones de entrenador desde la primera entrada.
La derrota de los Yankees por 2-0 ante los Atléticos fue una píldora difícil de tragar, pero la expulsión del manager Aaron Boone en la primera entrada añadió el insulto a la herida. Aaron Boone fue expulsado por el juez de home Hunter Wendelstedt tras lo que pareció un comentario del público o del banquillo de los Yankees. Wendelstedt declaró posteriormente que Boone es responsable de mantener el decoro dentro del banquillo, independientemente de la fuente del comentario. Esta explicación hace que algunos se pregunten si pudo haber una tensión subyacente entre Boone y el árbitro, pero no hay forma de saberlo con seguridad.
El árbitro Hunter Wendelstedt muestra una flagrante parcialidad contra el entrenador de los Yankees Aaron Boone
En el acalorado intercambio, Boone intentó discutir, diciendo que no había pronunciado ni una palabra. Sin embargo, Wendelstedt aprovechó la oportunidad para demostrar lo parcial y terrible que era, respondiendo despectivamente: “Me da igual quién lo haya dicho, te has ido”.
Según la emisión de YES Network, parecía que un aficionado de los Yankees o alguien del público con una camiseta azul había hecho el comentario que Wendelstedt atribuyó erróneamente a Boone. Incluso cuando Ausmus señaló que probablemente había sido un aficionado, Wendelstedt, claramente parcial, expulsó a Boone.
“Así que el aficionado de la camiseta azul es el que le dice algo a Hunter Wendelstedt, a eso reacciona, y echa a Aaron Boone, que dice: ‘¡Vaya! Yo no he dicho nada!”, explicó el locutor Ryan Ruocco.
El New York Post publicó el momento crucial durante el partido. La imagen muestra claramente a un supuesto hincha estallando en una diatriba dirigida al árbitro. En marcado contraste, Aaron Boone se mantiene sereno.
La prisa de Wendelstedt por expulsar al entrenador de los Yankees sin identificar adecuadamente la fuente del supuesto comentario fue una muestra inexcusable de incompetencia y parcialidad contra la organización de los Yankees. Sus acciones empañaron el partido de división y proporcionaron otro ejemplo flagrante de la relación rota y la responsabilidad entre árbitros y equipos.
El comportamiento del árbitro demostró su incapacidad para dirigir adecuadamente el juego de forma justa e imparcial. La parcialidad de Wendelstedt contra los Yankees hizo que éstos tuvieran que jugar el resto de la contienda sin la presencia de su mánager debido únicamente al mal juicio y la venganza del árbitro.
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