Dos shutouts consecutivos contra el mismo equipo es un hecho poco frecuente en la historia de los Yankees. Pero señala hasta qué punto ha llegado su bajón ofensivo. Ni siquiera el nombramiento del nuevo entrenador de bateo Sean Casey consigue reavivar la vacilante ofensiva de los Yankees, con o sin Aaron Judge.
La decisión de los Yankees de despedir al entrenador de bateo Dillon Lawson durante la pausa del All-Star y traer a Sean Casey fue un acto nacido de un sentido de urgencia. Por desgracia, hasta ahora, parece que no va a ir de todos modos. Bajo la dirección de Casey, el rendimiento ofensivo de los Yankees se ha mantenido prácticamente igual que cuando Lawson estaba al mando. Antes de la pausa, los Yankees registraron una línea de .231/.301/.410.
El cambio ofensivo de los Yankees tras la llegada de Sean Casey al banquillo
Desde la marcha de Lawson, sus estadísticas se sitúan en .232/.325/.376 a punto de concluir una serie de tres partidos contra los Braves en Truist Park el miércoles por la noche.
El rendimiento ofensivo de los Yankees ha experimentado un cambio, con una mejora marginal en el porcentaje de bases, una disminución de la capacidad de bateo y un OPS reducido (de .711 a .701). Bajo la dirección de Sean Casey, su media anotadora se sitúa en 3,9 carreras por partido, lo que supone un descenso respecto a la cifra anterior de 4,4 carreras.
En su conversación con The Post, Sean Casey hizo hincapié en la importancia de desafiar sistemáticamente a los titulares rivales y de mantener un enfoque constante de anotación de carreras. Señaló el carácter competitivo de los lanzamientos de la liga y mencionó específicamente la actual serie contra los Braves, destacando su gran capacidad ofensiva. Sean Casey insistió en la necesidad de que los jugadores lleguen a la base y aprovechen las oportunidades de anotar, haciendo hincapié en la importancia de convertir esas situaciones en carreras.
Según el entrenador Aaron Boone, ha observado avances en aspectos concretos, sobre todo que los Yankees muestran una mejor disciplina en el plato y ejercen una mayor presión sobre el lanzador inicial del equipo contrario.
Continúa la mala racha ofensiva de los Yankees
Sin embargo, ha sido difícil mantener un nivel constante de rendimiento, y el equipo ha oscilado entre actuaciones encomiables y otras más inciertas.
Actualmente, los Yankees se encuentran en un breve período de bajo rendimiento, logrando anotar sólo tres carreras en sus últimas 21 entradas. Durante su derrota del martes, un juego que empujó su récord a una relación equilibrada de victorias y derrotas, los Yankees sólo lograron un hit solitario del lanzador de los Bravos Bryce Elder, que había concedido 10 carreras ganadas en sus 9 ¹/₃ entradas anteriores, junto con las contribuciones de dos lanzadores de relevo.
Según Boone, en las últimas semanas se han dado casos en los que el equipo ha mejorado a la hora de realizar bateos más desafiantes, desgastando con eficacia al lanzador rival. Este ha sido un problema al que el equipo se ha enfrentado a lo largo del año y con el que sigue luchando en cierta medida. A pesar de ello, Boone señaló que en las últimas semanas los Yankees habían logrado encadenar tres o cuatro partidos con actuaciones sólidas en el plato, creando situaciones más difíciles para los lanzadores y oportunidades para ellos mismos. Aunque no han logrado el avance deseado, Boone reconoció que ello se debía en parte a la situación del equipo en cuanto a lesiones y a sus esfuerzos por recuperar la salud de algunos jugadores clave.
Los retos a los que se enfrenta el entrenador de bateo de los Yankees, de 49 años, son novedosos, y es difícil culpar a Sean Casey de las dificultades de alineación del equipo.
Aunque carece de experiencia previa como entrenador de bateo, a pesar de su impresionante historial como tres veces All-Star y su inclusión en el Salón de la Fama de los Reds por su destreza en el bateo, Sean Casey expresó su afinidad por el papel. A pesar de los resultados actuales, manifestó un interés genuino en continuar con este trabajo durante un periodo prolongado.
El nuevo entrenador de los Yankees está encontrando muchas satisfacciones en su puesto. Sean Casey mencionó que podría tener que evaluar su situación a finales de año. Destacó su satisfacción con sus responsabilidades actuales y la experiencia única de formar parte de la organización de los Yankees.
Según Sean Casey, está convencido de que se avecina un cambio de rumbo gracias al esfuerzo incesante y a la mentalidad resuelta que exhiben los jugadores día tras día. Sin embargo, es plausible que éste sea simplemente uno de esos años en los que todas las piezas no encajan.
Sean Casey mencionó que su amplia experiencia en el juego le ha enseñado que hay temporadas marcadas por la excelencia, otras por la mediocridad y otras por resultados olvidables. En esta coyuntura, a falta de 40 partidos, el objetivo de los Yankees sigue siendo aprovechar la oportunidad de rendir a un alto nivel y luchar por la permanencia en la postemporada.
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